El Kremlin ha desatado una nueva arma en su guerra de información con Occidente: el cameo falso de celebridades.
“Hola, Volodímir, soy Elijah”, dijo el actor Elijah Wood en un video montado de tal manera que parecía que Wood se estaba dirigiendo al presidente ucraniano Volodímir Zelenski. El actor, mejor conocido por interpretar a Frodo Bolsón en El Señor de los Anillos, instó al mandatario a someterse a un tratamiento por abuso de drogas y alcohol. “Espero que recibas la ayuda que necesitas”, terminó Wood.
El video se grabó en Cameo, la aplicación popular, aunque actualmente con problemas, en la que los usuarios pueden pagar por mensajes personalizados de famosos; en el caso de Wood, a partir de 340 dólares. Aunque era un video genuino, fue reutilizado como parte de los intentos de Rusia para denigrar falsamente a Zelenski y retratarlo como un neonazi drogadicto. A partir de julio, según un informe que publicó el jueves el Centro de Análisis de Amenazas de Microsoft, ese video y otros similares rebotaron en las redes sociales rusas y terminaron por aparecer en organizaciones noticiosas que son propiedad del gobierno o que están bajo su control.
Otras celebridades utilizadas en los videos —todos sin saberlo, al parecer— fueron Shavo Odadjian, un músico y productor, así como los actores John McGinley, Dean Norris, Priscilla Presley y Kate Flannery. Mike Tyson, el excampeón de boxeo de los pesos pesados, aparece en un video extraído de su propia página promocional en Cameo. Fue reutilizado sin ninguna grabación de su voz, aunque una voz en off hace una petición similar a Zelenski.
Flannery, conocida por su papel en la serie cómica de televisión La oficina, sostiene una botella de whisky de manera provocadora antes de ponerse seria en su mensaje. “En serio, será maravilloso”, dice. “Simplemente, hazlo”.
La campaña forma parte de una estratregia que se implementó en semanas recientes, la cual buscaba conseguir apoyo a favor de la guerra en Rusia, mientras en el extranjero se avivaba la oposición a ese conflicto.
“Los operadores cibernéticos y de influencia rusos han demostrado adaptabilidad a lo largo de la guerra en Ucrania, probando nuevas maneras de ganar ventaja en el campo de batalla y debilitar las fuentes de apoyo interno y externo de Kiev”, escribió Microsoft en su informe, para referirse a la capital de Ucrania.
Cameo señaló en un comunicado que esos videos violaban las normas de la comunidad de la empresa. “En los casos en los que se corroboren estas violaciones, Cameo suele tomar medidas para eliminar el contenido problemático y suspender la cuenta del comprador para ayudar a evitar más problemas”, mencionó el comunicado.
Las celebridades utilizadas en los videos no respondieron a las solicitudes de comentarios, pero un representante de Wood comentó que, aunque el actor había grabado el mensaje en Cameo, “de ninguna manera estaba dirigido a Zelenski ni tenía nada que ver con Rusia, Ucrania ni la guerra”.
La novedad de aprovechar cameos disponibles a nivel comercial enfatiza el ingenio —y la persistencia— de los esfuerzos de Rusia para intentar justificar su guerra en Ucrania. Aunque los investigadores de Microsoft no determinaron el origen exacto de los videos, los expertos que revisaron los hallazgos señalaron que la campaña tenía las características distintivas de otras operaciones encubiertas de información lanzadas desde Rusia.
Otra campaña comenzó el mes pasado con publicaciones en Facebook y en la plataforma de redes sociales X, antes conocida como Twitter. Los mensajes incluían fotografías de más de 75 celebridades de todo el mundo —entre ellas Oprah Winfrey y el futbolista portugués Cristiano Ronaldo— con citas en bloque que hacían eco de mensajes clave de la propaganda del Kremlin, según Antibot4navalny, un prominente grupo de voluntarios anónimos que ha expuesto las labores de troles rusos en línea.
“Sé que Estados Unidos hizo explotar los Nord Streams”, mencionaba una publicación acompañada de una fotografía de Beyoncé, en referencia a los gasoductos submarinos destruidos en el mar Báltico en septiembre de 2022. “¿En serio alguien piensa lo contrario?”. Las mismas frases aparecieron en una publicación con una foto de Richard Branson, el empresario multimillonario.
Las agencias de inteligencia estadounidenses y europeas tienen evidencias que sugieren que agentes de inteligencia ucranianos realizaron el ataque contra el oleoducto, aunque no se ha hecho pública ninguna información concluyente.
El grupo de voluntarios anónimos, cuyo nombre hace referencia a Alexéi Navalny, líder de la oposición rusa encarcelado, atribuyó la campaña a una operación de información coordinada que se llama Doppelgänger. Desde 2017, Doppelgänger ha estado vinculado a una gran variedad de iniciativas, incluida la creación de sitios web falsos que se hacen pasar por organizaciones de noticias reales en Europa y Estados Unidos.
Según los investigadores del grupo y otras personas, los más recientes esfuerzos de Rusia han recibido el apoyo de la inteligencia artificial, sobre la cual los expertos han advertido que podría acelerar la producción y diseminación de la desinformación.
El Instituto para el Diálogo Estratégico, una organización de investigación con sede en Londres que rastrea el extremismo en línea, informó el martes que había descubierto una red de 64 cuentas de bots en X que parecían estar utilizando contenido generado por el chatbot de inteligencia artificial ChatGPT para criticar a Navalny y a su organización, la Fundación Anticorrupción.
Aunque el contenido tenía algunas peculiaridades y rarezas, incluida una respuesta en X con el descargo de responsabilidad de ChatGPT contra el discurso de odio o el acoso, el informe del instituto mencionó que las capacidades de las herramientas de inteligencia artificial dificultaban cada vez más poder distinguir entre el contenido generado de manera artificial y el creado por humanos.
Según el informe, “para la mayoría de la gente que lee de manera informal una plataforma como X, el contenido podría pasar por auténtico con facilidad”.
Los videos de Cameo tuvieron el beneficio de ser grabaciones reales. Aparecieron por primera vez en cuentas de redes sociales rusas, como Telegram y VKontakte, cuyo contenido se apega mucho a los puntos de vista del Kremlin. Casi todos estaban en ruso, lo que sugiere que el público de la campaña eran los ciudadanos rusos. Una publicación con el mensaje de Flannery obtuvo más de 11.000 me gusta.
Tsargrad, una red de medios propiedad de Konstantin Malofeyev —un empresario conservador que desde 2014 ha recibido sanciones de Estados Unidos por su apoyo a la invasión rusa de Crimea y al este de Ucrania en ese momento—, luego amplificó las publicaciones.
Después aparecieron artículos sobre los videos en importantes organizaciones informativas rusas como la agencia estatal de noticias RIA Novosti y el periódico oficial Rossiyskaya Gazeta.
“Por toda internet se han dado cuenta repetidas veces del extraño comportamiento de Volodímir Zelenski en público y durante sus mensajes en video, y a menudo vinculan esto con una adicción a las drogas”, escribió RIA Novosti en agosto. El artículo incluía una nota a pie de página advirtiendo que Facebook e Instagram, ambos propiedad de Meta, están prohibidos en Rusia por ser extremistas.
Steven Lee Myers cubre temas de desinformación para The New York Times. Ha trabajado en Washington, Moscú, Bagdad y Pekín, donde contribuyó a los artículos que ganaron el Premio Pulitzer por servicio público en 2021. También es autor de The New Tsar: The Rise and Reign of Vladimir Putin. Más de Steven Lee Myers