El presidente Volodímir Zelenski imploró el jueves a los representantes de unas 50 naciones que mantengan su apoyo militar a la guerra de casi tres años de Ucrania contra Rusia, afirmando que “sería una locura dejar caer la pelota ahora”.
“Está claro que el nuevo capítulo comienza para Europa y para el mundo entero dentro de solo 11 días, en un momento en que tenemos que cooperar aún más, confiar aún más los unos en los otros y lograr juntos resultados aún mayores”, dijo Zelenski, refiriéndose a la toma de posesión del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, el 20 de enero. Trump ha expresado públicamente sus dudas sobre la posibilidad de seguir ayudando a Ucrania una vez que asuma el cargo.
“Considero que es un momento de oportunidades y renovación en casi tres años de guerra a gran escala”, dijo el presidente ucraniano.
Zelenski añadió a continuación: “Hemos recorrido un camino tan largo que, sinceramente, sería una locura dejar caer la pelota ahora y no seguir construyendo sobre las coaliciones de defensa que hemos creado”.
Sus comentarios se produjeron durante la inauguración de la 25.ª reunión del Grupo de Contacto para Defensa de Ucrania, que se ha reunido aproximadamente cada mes desde las primeras semanas de la guerra y está formado por al menos 53 naciones que han ofrecido ayuda financiera, armas, municiones y otros materiales militares a Kiev para su uso contra las fuerzas de invasión rusas y norcoreanas.
En la conferencia, el secretario de Defensa de EE. UU., Lloyd Austin, anunció oficialmente un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania por valor de 500 millones de dólares, que forma parte de una autorización presidencial que el gobierno de Joe Biden, en sus últimas semanas, ha estado utilizando para mantener el flujo de ayuda a Ucrania.
La nueva ayuda incluye misiles para la defensa antiaérea, municiones aire-tierra, material de apoyo para aviones de combate F-16 y equipos de comunicaciones seguras, dijo EE. UU.
“Lo que está en juego sigue siendo enorme para toda nuestra seguridad”, dijo Austin, en su última aparición con este grupo antes del cambio de administraciones. “Si Putin se traga Ucrania, su apetito solo crecerá. Si los autócratas llegan a la conclusión de que las democracias se asustarán, renunciarán a sus intereses y olvidarán sus principios, solo veremos más tomas de territorios. Si los tiranos aprenden que la agresión vale la pena, solo invitaremos más agresión, caos y guerra”.
Habló en el mismo salón del Club de Oficiales de la Base Aérea de Ramstein donde el grupo de contacto se reunió por primera vez en abril de 2022.
La jefa de política exterior de la Unión Europea, Kaja Kallas, ex primera ministra de Estonia, dijo que esperaba que Estados Unidos, bajo el mandato de Trump, mantuviera su firme apoyo a Ucrania, pero que la UE estaba dispuesta a asumir un papel de liderazgo si fuera necesario.
El grupo de contacto también dio la bienvenida a su miembro más reciente, Chipre, que rompió relaciones con Rusia —su benefactor militar durante mucho tiempo— por la invasión de Ucrania que el presidente Vladimir Putin comenzó en 2022.
“Hemos formado parte de este esfuerzo durante años, desde el principio”, dijo el teniente general Georgios Tsitsikostas, jefe de la Guardia Nacional de Chipre, en una entrevista antes de que comenzara la reunión. “Desde el primer momento, Chipre declaró su posición cercana a Ucrania, aunque eso tuviera un costo para nosotros”.
El general Tsitsikostas explicó que su ejército lleva mucho tiempo utilizando material ruso y disfrutando de buenas relaciones con Moscú, pero indicó que el apoyo de su país a Kiev —que ha incluido ayuda humanitaria y entrenamiento de retiro de minas de soldados ucranianos en territorio chipriota— había provocado algunas fricciones con Rusia.
Al igual que muchos de los antiguos clientes militares de Rusia, el ejército de Chipre ha empezado a comprar armas con estándares de la OTAN, dijo el general, lo que forma parte de un esfuerzo global de Estados Unidos por realinear a más países anteriormente vinculados a Moscú estableciendo lazos más estrechos con Estados Unidos y la OTAN. Chipre es miembro de la Unión Europea, pero no de la OTAN.
Con la posible reducción del apoyo de Estados Unidos en un segundo gobierno de Trump, conseguir la ayuda de aún más países como Chipre es fundamental para el esfuerzo bélico de Zelenski, al igual que lo es mantener el apoyo del mayor número posible de países dentro del grupo de contacto.
“Pase lo que pase en el mundo, todos quieren sentirse seguros de que su país no será borrado del mapa sin más”, dijo Zelenski. “Eso solía depender de un puñado de grandes capitales, pero ahora depende de todos nosotros, de cómo trabajemos juntos, de lo dispuestos que estemos a adueñarnos de nuestro futuro y de lo bien que podamos convencer a nuestros socios para que nos apoyen”.
“Cuanta más determinación mostremos en la defensa de nuestros intereses, más interés verán nuestros socios, y especialmente EE. UU., en el bien que significa permanecer de nuestro lado”, añadió.
Cassandra Vinograd colaboró con la reportería desde Kiev, Ucrania.
John Ismay es un periodista que cubre el Pentágono para el Times. Sirvió como oficial de desactivación de artefactos explosivos en la Marina estadounidense. Más de John Ismay